jueves, 14 de enero de 2016

Equitación y salud... ¿Algo que ver?

En primer lugar, la equitación como cualquier deporte nos aporta una gran cantidad de beneficios, pero, ¿por qué más que el resto?

Hoy hablaremos a nivel físico. Contrariamente a lo que e suele pensar, la montura no lo hace todo, Montar a caballo requiere un trabajo muscular bastante importante. Nuestro animal necesita que le empujemos con las piernas, trabajando músculos en ella que en pocos otros deportes seríamos capaces de desarrollar. A su vez incrementa en gran cantidad la masa muscular abdominal (la parte inferior sobre todo) y la espalda, debido a que el caballo necesita ser ayudado por lo que los jinetes denominamos "asiento" para conseguir nuestras metas. Por supuesto, el contacto con la boca del equino no se queda atrás. las amazonas sobre todo tienen una gran sensibilidad en las manos con respecto al mando del animal. La equitación ayuda notablemente a mejorar este aspecto, puesto que es un requisito indispensable para "montar bien". El equilibrio también se trabaja de forma única y los jinetes , sobre todo jókeys y especializados en volteo, tienen una gran capacidad para mantener una posición fija en una base inestable como es el caballo.

El desgate energético de este deporte es bastante sorprendente. Trabajando , lo que se dice trabajando (muy diferente de dar un paseo) se suelen quemar de 300 a 750 Kcal por hora. El trabajo muscular es intenso durante todo el tiempo, sin disponer de mucho descanso para el caballo ni para el jinete. Si se practica de manera reiterada se desarrollan cualidades respiratorias y permite muscular el corazón. En conclusión, físicamente esta disciplina es de las más completas, puesto que trabaja una gran cantidad de aspectos en nuestro cuerpo.

martes, 12 de enero de 2016

Hablemos de calorías...

¿A qué se refiere la gente cuando habla de calorías? Pues bien, la caloría es una unidad de medida. Pero no de peso ni longitud, sino energía. Cuando escuchas que algo tiene 150 kilocalorías quiere decir que esa es la energía que te aportaría. Sin embargo, un exceso de ellas y no quemar las suficientes a través del ejercicio físico puede hacer que aumentes de peso, claro que todo depende de tu metabolismo.

Existen cuatro elementos que nutren de energía al cuerpo, pero de estos cuatro solo tres aportan nutrientes: los carbohidratos, las proteínas y las grasas. El cuarto elemento es el alcohol, que no
aporta nutriente alguno excepto las calorías.

La cantidad de energía que estos elementos aportan al cuerpo es de:
    ·Carbohidratos: 4 Kcal x gramo
    ·Proteínas: 4 Kcal x gramo
    ·Grasas: 9 Kcal x gramo
    ·Alcohol: 7 Kcal x gramo

Nuestro cuerpo necesita calorías para llevar a cabo todas sus funciones; no solo quemamos energía al movernos, sino también al respirar, pensar, mantener la temperatura constante y para que nuestro corazón siga latiendo. Por lo tanto, no debemos pensar en las calorías como algo malo.

lunes, 11 de enero de 2016

El metabolismo

Cada vez que ingieres algún tipo de alimento tu cuerpo tiene que trabajar duro para procesarlo. Mucho después de hacer la digestión, los nutrientes que hayas ingerido se convertirán en los componentes básicos que necesita tu cuerpo para funcionar correctamente.

El metabolismo es un conjunto de reacciones químicas que tienen lugar en las células del cuerpo. El metabolismo transforma la energía que tienen los alimentos en el combustible que necesitamos para todo lo que hacemos, desde movernos hasta pensar. Sin embargo, los principales protagonistas de este proceso son dos: el hígado y la glándula tiroides.

La glándula tiroides, ubicada en el cuello, segrega unas hormonas que regulan el ritmo de nuestro metabolismo. Si algo funciona mal en la glándula tiroides, repercute en todo el cuerpo. Asimismo, si la glándula tiroides es quien "dirige" el hígado es la "fábrica"; este órgano es el que interviene más intensamente en los procesos de transformación metabólicos. En él se produce la síntesis de proteínas a partir de los hidratos de carbono, la glucosa o la sacarosa.

Cada persona tiene un metabolismo distinto, y sus particularidades vienen inscritas en los genes. Sin embargo, el metabolismo no es algo inmutable y puede sufrir modificaciones. El ejercicio o una alimentación saludable pueden aumentar el metabolismo, así como todo aporte de adrenalina. En el sueño, en cambio desciende el metabolismo. La edad también influye; un recién nacido tiene un metabolismo dos veces más rápido que el de un adulto.

sábado, 2 de enero de 2016

Bienvenidos

Bienvenidos a "Mens sana in corpore sano", un blog innovador que aúna las principales bases de una vida sana y que os animará a cuidar vuestra alimentación y llevar un buen hábito deportivo con numerosos vídeos, información sobre diferentes deportes e interesantes datos sobre qué es y qué no es una dieta equilibrada. Esperamos que nuestro contenido os sirva de ayuda para mejorar vuestra salud.